SANADORA
Hoy quiero dar un homenaje, a todas esas mujeres que en canarias curaban y sanaban con los únicos medios que ofrecía la Madre Tierra.
Estas mujeres con sus rezos y manos bien dirigidas por su sabiduría y conocimiento,ayudaron muchisimo y se ganaron un alto estatuo entre el pueblo.
Sabían desde quitarle un empache a un chiquillo hasta llevar el embarazo a una preñada.
Pero como todo, tiene su lado malo, todo este conocimiento quedo en el pasado, donde muy pocos quedan ya y los que quedan no tienen a quien dejar su legado.
Estas mujeres aprendieron de sus madres y abuelas, conocían como la palma de sus manos el monte y sabían perfecta mente los secretos de las plantas: como y cuando cosecharlas, para que era cada una de ellas, ungüentos y maceraciones, que aun hoy se conserban, rezos para sacar toda medicina espiritual de ellas, etc.
Tenían que vivir a escondidas, o apartadas de, heran tratadas como brujas he icnorantes, da la casualidad que quienes trataban de acallar las y desterrarlas heran : la santísima madre iglesia, los médicos y estudiosos. ¿ Por que? No les convenía, primero por que eran mujeres, segundo por que se les escapaba el poder y la controlacion que tenían con el pueblo.
Estas mujeres no necesitaban de una radiografia para ver un hueso roto, solo con tocar ya sabían, con tu forma de caminar y moverte te daban un diagnostico, sin estudios, pero tenían la escuela de la vida y esa tiene mas peso que todas las universidades juntas.
La bruja, esa solo se dedicaba hacer daño y bien se conocían quienes eran.
Estas sanadoras como yo las llamo, se ganaron el respeto de un pueblo que no tenían medios para ir a un medico y lo mismo te cobraban con huevos como con una gallina.
Eran las naturopatas del pasado, como yo ahora, doy las gotas y las pastillas, ellas daban las hierba verdes y fresquitas.
Arreglaban la madre, que no es otra cosa que la contracción del diafragma opresión de la arteria . Ellas lo relajaban y quitaban esa opresión con masajes y rezos. Y aun en día la gente buscan , las buenas amañadas para que le coloquen su madre o al hombre el padre jon.
Creo que a todas estas mujeres se les deben un reconocimiento, por todo el bien que hisieron y a las de hoy curanderas buscar libros y hablar con los viejos y empaparse de todo este conocimiento y que no se pierda, como tantas cosas nuestras se han ido a la tumba con nuestras queridas abuelas.
Stiosbi, Nachie .
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